Salimos temprano por la mañana un domingo rumbo al mercado de frutas de la Victoria, desde este lugar parten los buses hacia Antioquía, en la esquina de Rosa Toro y Nicolás Arriola, llegamos cerca de las 8am y encontramos el bus de la empresa Sr. de Muruhuay, el pasaje estaba en S/.7 soles, nos ubicamos en nuestros asientos y partimos cerca de las 8.45am rumbo a nuestro destino, la carretera está afirmada y es de una sola vía asi que hay que tener cuidado cuando te encuentras con otro auto en sentido contrario, pasamos por los pueblitos de Chontay, Nieve Nieve y Sisicaya hasta llegar al Km.65 donde se encuentra el colorido pueblito de Antioquía, la primera impresión que tienes es el de encontrarte en un pueblito de cuentos, las casas pintadas de blanco y adornadas con flores, pájaros y caballos por todas partes le dan un especial atractivo al lugar. Llegamos cerca de las 10.30am y lo primero que vimos fue su plazita muy bien cuidada, en la misma plaza pueden encontrar servicios higiénicos y la iglesia local también se encuentra en la plaza, sencilla pero bonita, preguntamos por el mirador de Amancaes, nos dijeron que vayamos hasta la altura del estadio municipal, lo cruzáramos que habia una entradita para subir el cerro donde estaba el mirador.

Se puede contemplar todo el valle aunque el mirador no está a mucha altura que digamos, siguiendo por la izquierda existe un caminito por el mismo cerro que lleva a Cochahuayco, el cual se encuentra a escasos 3 Kilómetros, el caminito en su comienzo es accesible pero conforme se avanza se hace más complicado, especialmente al momento de bajar hacia la carretera, felizmente nadie salió herido (salvo una graciosa caída) y pudimos seguir nuestro camino, cruzamos un puente sobre el rio Lurín y un arco nos daba la bienvenida a Cochahuayco, cuyo principal atractivo es su iglesia que data del siglo XVIII la cual solo se abre para dar misa los domingos, aquí se puede comprar mermelada de membrillo y guayaba asi como vinagre de manzana, el pueblito es más pequeño que Antioquía pero la gente del lugar trata de mejorar sus condiciones de vida mediante el turismo y la venta de sus productos, la zona es ideal para el trekking ya que incluso se puede seguir el antiguo camino inca que incluso está indicado en un cartelito ni bien llegas a Cochahuayco.

De regreso hacia Antioquía refrescamos nuestros pies en el rio Lurín, hagánlo se los recomiendo, el agua no está fria y ayudará a recargar las energías luego de la caminata por el cerro, los mosquitos estarán a la orden así que lleven repelente, ir por la carretera afirmada es más sencillo y rápido asi que nos tomó cerca de media hora el retorno, buscamos un lugar donde almorzar, aunque no encontramos lo que hubiésemos querido, el chupe de camarones estuvo bueno, me quede con las ganas de probar la huatia de carne, aprovechamos para pasear por las callecitas como quien baja el almuerzo para luego esperar el bus que nos llevaría de regreso a Lima, pero este no se aparecía hasta que un gentil policía destacada en san Lorenzo de Quinti y que estaba de paso por el lugar rumbo a Lima nos jaló para nuestra suerte! esta vez el retorno fue más rápido y habremos estado de regreso en Lima cerca de las 6pm.